viernes, 12 de agosto de 2011

Tan solo lluvia...

Bajo las luces que llenaban el frío pavimento de colores cálidos, bajo la fuerte lluvia que empapaba sus cuerpos abrazados, ella sonreía para sí; su negro maquillaje corría como ríos por sus pálidas mejillas, gracias a la lluvia él nunca sabría que estaba llorando.